Te Sirvo De Manual

Te Sirvo De Manual

Se pasea la tarde en mi ventana
Con un hueco en el centro de los ojos,
su aliento de fogata titubeante
no persigue el enigma de la estrella.

Algo falta y tú no eres.

Parece que el bailable de las cosas
no pudo soportar tu lejanía,
con un ritmo fúnebre fue a buscarte.

Creíste que no iba a darme cuenta,
la risa de la nube esta pintada
con tú lápiz labial de falsedades.

La fiesta de los cielos también se fue contigo,
todo sabe no valía la pena quedarse.

No tengo tu ventaja de desértico hielo
que sirve congelado o disuelto.

Mi camino es mortal como el de todos
pero el tuyo presume eternidades
que reinician con la lumbre del olvido.

Caminos similares a los míos
donde a todos por igual los amas,
pero usarás la ruina de mis labios
para saber cómo.

Jorge Santana

Pintura por Picasso, Jeune femme en chemise